“Durante una residencia en FLORA ars+natura Bogotá, fui recolectando filtros de aire de autos. Estos filtros contienen una membrana de papel, parecida a un acordeón, y que funcionan como un receptáculo para crear una serie de dibujos y esculturas que cuando se contraen esconden los intersticios de la membrana, y opuestamente, cuando se expanden se muestran fusionados con el humo y el aceite que quedó impregnado.

Me interesa activar un proceso arqueológico pragmático, donde los materiales deteriorados adquieren una dimensión estética preponderante que no anula su origen. Al contrario, esa reutilización permite abrir algunas interrogantes sobre las implicaciones que tienen en nuestras vidas esos ciclos acelerados de producción, consumo, y desecho tan propios de nuestra época.

Al aprovechar las membranas de papel que se alojan en el interior de los filtros, aparecen sutiles abstracciones que se mimetizan con la ergonomía corrugada del material.

El resultado visual es un conjunto de piezas que por la disposición e identidad de los materiales, así como por sus referencias visuales, tratan de incentivar la sospecha sobre la aparente pulcritud de las cosas, así como revertir el sentido de la tradición geométrica abstracta cuyas aspiraciones decontaminadas del entorno social quisiera poner en duda.”

— Adán Vallecillo